Vacaciones, tiempo para acercarnos más a nuestros hijos

Para los padres el tiempo de vacaciones se convierte en algo complicado, y muchas veces la solución más rápida es facilitarle a nuestros hijos un dispositivo tecnológico para que se entretengan, pero estas alternativas no siempre son las más adecuadas, es necesario una buena orientación y supervisión. Además, llega un momento en que se aburren.

Las vacaciones no deben ser un periodo de pérdida de tiempo, pasar muchas horas frente a un televisor, tableta, celular, iPad, computadora, videojuego, etc., no es lo más recomendado para nuestros hijos. Es importante y necesario buscar alternativas para realizar con los niños y que le permitan desarrollar y potenciar sus habilidades, desarrollar la creatividad y aprovechar al máximo el tiempo sin dejar de divertirse.

Hagamos que se sientan parte del plan. Las vacaciones son oportunidades para estrechar los lazos familiares, crear empatía, fomentar los valores, etc. Una buena planificación es esencial por parte de los padres, y así evitar que nuestros hijos, además de perder el tiempo en cosas sin ningún tipo de aprovechamiento y aprendizaje logren pasarla bien.

Una buena estrategia es hacer que nuestros hijos participen en la planificación de sus vacaciones, de esta manera se sentirán parte del proyecto. Acompañarlos en este tiempo implica saber sus necesidades y preferencias, para que se identifiquen con las actividades que realizarán. De esta manera podrán disfrutar y desarrollar su creatividad en un entorno agradable y confortable durante sus vacaciones.

Esto supone un verdadero reto para los padres, sobre todo teniendo en cuenta que ambos padres suelen trabajar y que sus vacaciones son mucho más cortas que las de nuestros hijos. Además, no existe una fórmula única, ya que esto depende de cada familia y de las edades de los niños. En este post queremos sugerirles algunas actividades, que dependiendo de nuestras circunstancias podemos realizar juntos o incluso en nuestra ausencia.

Tiempo de lectura

Ayude a sus hijos a ver la lectura como algo divertido, no obligatorio y aburrido, sino que puede ser un mundo lleno de aventuras y aprendizaje, que puede ser tan entretenido como jugar o hacer algún deporte. Seleccionen el tipo de lectura juntos, es importante que ellos se sientan parte de las decisiones y haga la lectura un espacio lúdico, donde se puede compartir y dialogar. Esto, ayudará a nuestros hijos a aumentar su vocabulario y estimular su pensamiento.

Realice secciones de lectura cortas 15 o 20 minutos al día, serán más que suficiente para que su hijo quede con el interés de volver a leer, al menos que él mismo decida leer por más tiempo.

Los niños aprenden con el ejemplo, por lo tanto, es importante que nos vean leer y que vean la lectura como algo entretenido. De ahí la importancia de hacer la selección con ellos, para que su lectura resulte interesante y entretenida.

Los beneficios de la lectura ayudan a mejorar sus destrezas lectoras, afianzan las habilidades adquiridas durante el año escolar, fomenta la creatividad, su imaginación y los acerca a mundos que de otra manera no podrían conocer.

Realizar actividades culturales

Salir de nuestras casas con nuestros hijos para ofrecerles pasatiempos culturales que favorezcan el desarrollo de su imaginación y su creatividad, contribuye al desarrollo cognitivo y emocional a la vez que se divierten, ir con ellos de visita a bibliotecas, museos, teatros, conciertos infantiles o parques temáticos, talleres de pintura y música, entre otros. Las cosas que se presentan en estos escenarios, no sólo los entretienen, sino que se convierten en espacios de aprendizaje.

Actividades al aire libre

Los paseos en familia no deben faltar, lo conveniente es que se dedique por lo menos una tarde a conocer algún lugar distinto a los habituales, esto favorece la unión familiar y la interacción con el medio, además, los niños pasarán un momento agradable. Salir de picnic con nuestros hijos es una buena experiencia.

Manualidades divertidas

Realizar este tipo de actividad se convierte en los niños en un verdadero placer y entretenimiento, alegre e inolvidable.  Los especialistas de la conducta coinciden en que este tipo de actividad estimula y refuerza los procesos mentales.

Se trata de creaciones originales y bonitas, que hacerlas junto a nuestros niños, se convierten en salida creativa y ofrece la oportunidad a los niños de usar la imaginación, acercarnos y estrecha los lazos.

Visitar nuestros familiares

Una forma de enseñarles sobre sus raíces familiares, consiste en viajar al pueblo natal de los padres. Es una buena forma de que aprendan más de la tradición y la cultura de la familia, amistades de sus padres y por qué no, también las tradiciones y culturas de nuestros pueblos. Es una buena actividad para hacer con los niños, ya que les enseña la importancia de la relación en la familia, mejorando también la comunicación con otras personas.

El deporte para compartir en familia

Las vacaciones son un momento ideal para comenzar con la práctica continua de algún deporte, el cual hay que adecuar a la edad y preferencias del niño. Buenas opciones son el béisbol, el fútbol, voleibol, natación, básquetbol, bicicleta, entre otros.

Realizar actividades deportivas fortalece la voluntad, la disciplina, el trabajo en equipo, los hace más fuertes no solo físicamente, sino también emocionalmente. También les ayuda a desarrollar coordinación, equilibrio y concentración, habilidades primordiales para los niños. Cuando un niño realiza un deporte, esto favorece la formación de su autoconcepto y de su autoestima, ya que, siente que es “capaz” de realizar alguna destreza en particular. Por otro lado, niños diagnosticados con “hiperactividad” o “agresividad” encuentran un buen medio para expresar sus impulsos y canalizarlos.

Una de las mejores maneras para incentivar la actividad física en los niños es que los padres sean el ejemplo y lleven una vida activa y saludable. Por lo tanto, aprovechemos estas vacaciones para realizar deporte juntos es una excelente opción.

Montar bicicleta juntos

Excelente forma de compartir con nuestros hijos, ya que se práctica un ejercicio físico, además, ayuda a desarrollar habilidades motrices. No es solo el montar bicicleta, es una forma de tener una relación más cercana con nuestros hijos.

Para ellos esta actividad representa varios beneficios, entre los principales están: contribuye en la psicomotricidad, aumenta la resistencia, potencia la velocidad y la agilidad, estimula e incrementa la coordinación y el equilibrio, fomenta el desarrollo de los valores sociales (compañerismo, respeto, tolerancia, solidaridad; además de desarrollo un espíritu de sacrificio, seguridad y confianza), crea una conciencia ecológica, aumenta la autoestima, entre otros.

Responsabilidades en casa

En vacaciones no debemos olvidarnos de exigirles responsabilidades y colaboración, aunque con unos horarios más flexibles. Se pueden hacer actividades que promuevan la autonomía y valores personales como el orden o la limpieza. Por ejemplo, podemos pedirles ayuda para arreglar o limpiar algunas cosas, preparar el almuerzo o comida, algo que requiera responsabilidades diferentes a las  que habitualmente les solicitamos.

El trabajo colaborativo es una experiencia que puede enseñar valores como la responsabilidad, el respeto, la honestidad, la amabilidad, etc. Los niños logran de esta forma desarrollar la empatía, es decir, ponerse en el lugar del otro. Es importante recordar que los estamos preparando para el futuro, donde existen responsabilidades y si las incorporan con naturalidad, la vida se les hará más fácil.

Tecnología y nuestros hijos

Sabemos que la tecnología ofrece excelentes oportunidades para toda la sociedad. Cada vez se desarrollan más experiencias e investigaciones que demuestran la importancia y utilidad de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) como herramientas de apoyo en el proceso de enseñanza, aprendizaje y para el entretenimiento familiar e individual.

La tecnología nos ofrece diferentes opciones que podemos aprovechar con nuestros hijos. Se ha convertido en parte esencial de nuestra vida y fuente de recursos en cantidad prácticamente ilimitada, que bien utilizados podemos sacarle provecho.

Estas tecnologías han cambiado el estilo de vida de la mayoría de las familias, incluso, hoy en día, adultos y niños manejan los dispositivos tecnológicos de manera cotidiana, el problema es que el uso indiscriminado y sin supervisión, puede provocar complicaciones en el desarrollo cognitivo y conductual de los niños.

En la actualidad, algunos estudios sugieren que los niños y adolescentes sean supervisados por sus padres y racionen el tiempo que pasan conectados. Esto lo lleva a tener una vida sedentaria que le afecta de manera significativa, en una etapa crítica del desarrollo integral (físico y psicológico).

Hay que orientar a nuestros hijos a hacer un uso significativo de la tecnología proporcionándoles las herramientas necesarias para su aprovechamiento y que la misma sirva para mejorar sus aprendizajes.

Hablemos con nuestros hijos de las cuestiones de seguridad en el uso de las tecnologías. Enseñarlos a pensar y analizar de forma crítica su comportamiento en las redes. Del incremento de los peligros existen y que pueden encontrar en el Internet, cosas tales como el ciberbullying, el grooming, el sexting, la exposición a contenidos sexuales inapropiados o el acceso a comunidades virtuales que pueden promover comportamientos dañinos.

El reto de nosotros como padres es orientar y educar a nuestros hijos para que se desenvuelvan de forma segura en el mundo digital. Tenemos un papel primordial que desempeñar en su aprendizaje y en las habilidades necesarias para navegar de forma segura.

Fuente: http://www.educando.edu.do/